sábado, 22 de junio de 2013

Ariel Oreja, historia de un baluarte


Uno: nuestro desafío es poder seguir un caso, cubrir un hecho o una situación, pero con las reglas y los tiempos del otoperiodismo.

Hubo un tiempo en que los Hombres se escuchaban. No mucho, pero se escuchaban. Después vinieron los llamados de oyentes a la radio, las encuestas de opinión, facebook, twitter, los coments, la camada de entrevistadores que pretenden mayor protagonismo que el entrevistado... y entonces ya todos quisieron hablar.